En pasado jueves se dieron una serie de detenciones de referentes del Kirchnerismo en el marco de una creciente crisis del gobierno nacional. Luego de “perder” un submarino con 44 marinos, en un procedimiento lleno de irregularidades, hasta esconder los últimos 8 llamados de la tripulación, y de no poder llevar adelante su plan de poder aprobar en el congreso antes del 10/12 las tres leyes principales de lo que llama el “reformismo permanente” la de reforma laboral, previsional e impositiva, la triada que completa el plan de guerra hacia el conjunto de la clase obrera y el pueblo trabajador.

Plan que no ha podido llevara cabo en los tiempos que se proponía, terminadas las sesiones ordinarias sólo logró media sanción de la reforma previsional. Con un congreso rodeado por una movilización donde cientos de miles de trabajadores rechazaron las reformas en la puerta del congreso, movilizaciones que continuaron la semana siguiente con miles de trabajadores en las calles, donde la clase obrera y el pueblo trabajador ha demostrado que le quedan reservas para enfrentar los planes del gobierno.

Es en este contexto que el juez, adicto al gobierno, Bonadio; lanzó todo un combo de medidas, por presunto encubrimiento de la causa AMIA, específicamente por el memorandum de entendimiento con Irán votado en el Congreso.

Con todo un show digno de Hollywood, en los principales canales de televisión se pudo ver como fueron puestos en prisión preventiva algunos de los principales referentes del Kirchnerismo entre ellos Luis  D’Elía, Carlos Zanini, Fernando Esteche y el referente de la comunidad islámica Jorge “Yussuf” Khalil y, también se pidió el desafuero de Cristina Kirchner y Hector Timmerman para su detención y se procesó Oscar Parrilli y Andres “Cuervo” Larroque.

De esta manera el juez que ya ha sido a apartado de esa misma causa por encubrimiento, hoy pide prisión por actos de gobierno que más que un intento de esclarecer la causa AMIA, se muestra como una causa que no es mas que un hecho de persecución política, que hoy le toca al Kirchnerismo y que le puede tocar a cualquier fuerza política de oposición. Lo que se conjuga con el plan de recrudecimiento del aparato represivo del gobierno, que lejos está de llevar justicia a las víctimas de la AMIA, sino todo lo contrario porque sigue en la línea de décadas de desvíos de la investigación.

Todo este circo, tiene el don de beneficiar al gobierno en otros planos, se genera todo un show mediático para sacar del foco de la agenda política las reformas que pretende rifar  derechos de la clase obrera,  ganados en años de lucha, y desvía el foco de conflicto que ello conlleva,  mediante una la política de fortalecimiento de la famosa “grieta” entre Kirchnerismo y el PRO que tanto le ha rendido al gobierno, cada vez que quiere llevar las medidas mas antipopulares.

¡JUSTICIA PARA LAS VICTIMAS DE LA AMIA: APERTURA DE LOS ARCHIVOS DE LA SIDE Y LA AFI!

¡LIBERTA A LOS/AS PRESOS/AS POLÍTICOS  Y ABOSLUCIÓN DE TODO/AS LOS/AS LUCHADORES/AS!

PRC, 09/12/2017.