Un fallo reaccionario
La Corte Suprema de Justicia, una institución vitalicia, donde llegan Jueces mediante la rosca y sin ninguna legitimidad ante el pueblo, se largaron a dirimir el conflicto entre CABA y Nación sobre la presencialidad de las clases, en un fallo reaccionario y partidista.

La escuela en pandemia
Ha quedado claro ya a esta altura que la educación presencial es un factor que profundiza y acelera los contagios de COVID19. La segunda ola que estamos atravesando fue acelerada claramente por la presencialidad en las escuelas, que a grandes rasgos comenzaron con fuerza a partir del primero de marzo. A sólo 15 días de eso la aceleración de casos era ya un hecho verificable.
La política aperturista del Gobierno de CABA, al mando de Larreta y el PRO, es parte de un entramado político electoral mezcla con una base social negacionista de la pandemia y de la representación de las patronales que presionan por el aperturismo ilimitado.
El Gobierno de Alberto Fernández, también en representación de las patronales, venía impulsando el aperturismo llegando a decir en sus discursos públicos en la boca del Ministro de Educación Trotta que “en las escuelas no hay contagios” o la Ministra de Salud diciendo que en “fábricas y escuelas no hay contagios”.
En este cuadro, se desarrolló lo esperable y lo que venían denunciado los SUTEBA combativos de Conducción Multicolor y ADEMyS, en contraste con el silencio cómplice de CTERA, el aumento de casos, la saturación del sistema de salud y el aumento de las muertes por covid19. La educación moviliza a un tercio de la población del país, llevarla a la presencialidad evidentemente va a impactar sobre la gente que circula y sobre los contagios.
La Corte Suprema de (in)Justicia
Un fallo con firmas digitales, ya que la corte funciona en la virualidad por los contagios de COVID19, los jueces millonarios y vitalicios decidieron la suerte de cientos de miles de personas.
El fallo de la corte recoge el espíritu de la Ley Federal de Educación de factura menemista y que la Ley de Educación Nacional Kirchnerista ha dejado intacto. Cada jurisdicción define sobre sus escuelas. Esto es así desde el 94 cuando la CTERA entregó la lucha contra la ley federal.
A pesar del discurso progresista, el sistema educativo sigue estando fraccionado en provincias y la Corte Suprema de Justicia toma esa base para permitir que Larreta no adopte medidas de resguardo de la salud y la vida de Docentes, Auxiliares y Estudiantes.
Los jueces que han tomado la decisión ¿Quiénes son? ¿Qué saben de educación? ¿A qué docentes entrevistaron o auxiliares? ¿Qué escuelas visitaron? ¿A qué médicos consultaron?
Nada de nada. Los jueces decidieron leyendo papeles con números amañados. El juego de la Corte es otro, es parte del entramado de poderes en pugna de la propia burguesía, interviniendo en el contexto de campaña electoral y de batallas judiciales entre bandas de corruptos y millonarios que están al mando del Estado, entre ellos los jueces federales y de la corte suprema, todos involucrados en la corrupción estatal-patronal y millonarios.
La decisión de apañar el negacionismo del Gobierno de CABA y la pretensión de arbitrar entre las facciones políticas de las cuales son parte, son un golpe muy duro contra la clase trabajadora que es la que pone los muertos de COVID19 contagiándose en transportes hacinados y lugares de trabajo.
La CTERA debe llamar al paro nacional
En este contexto, la CTERA debe llamar al paro nacional hasta doblegar al gobierno de Larreta. Una huelga docente en todo el país votada en asambleas de base que ponga sobre la mesa la necesidad de suspender la presencialidad, no sólo en CABA, sino en todas las jurisdicciones en que aumentan los casos fuertemente como Mendoza, Santa Fe o Córdoba.
La Lista Celeste de Baradel y Alesso sostuvo junto al gobierno nacional el discurso de Trotta sobre los protocolos y la no existencia de contagios en las escuelas. Cuando la docencia comenzó a sentir el golpe de los contagios y a deleiberar, comenzaron a emitir comunicados de alerta. Cuando el 14 de abril se dio el paro de ADEMyS y de los SUTEBA combativos de conducción Multicolor desnudó la impostura de los burócratas.
Hoy más que nunca es fundamental no dejar sólos a lxs docentes de CABA, aportando al fondo de huelga de ADEMyS y exigir a los sindicatos de base de CTERA la huelga nacional contra la presencialidad criminal en el marco de la segunda ola de COVID19.